por Lia Mendez
Un poco de historia. El aporte del humanismo a la causa de los derechos humanos de la mujer.
8 de marzo de 1984, irrumpe un movimiento joven, muy joven, por su historia y por su composición, Se funda el Partido Humanista de Argentina , que fuera el germen de otros fundados en distintas latitudes, siempre bajo los mismos principios y las misma base filosófica: el Nuevo Humanismo Universalista.
La base filosófica desarrollada por Silo, Mario Luis Rodríguez Cobo, quien nunca quiso ser llamado filósofo, a pesar de haber puesto en marcha una corriente de pensamiento, abarcativa de todos los campos del quehacer humano, desde la psicología hasta una nueva espiritualidad.
Aquel movimiento que había desplegado su acción militante durante la dictadura llevando un mensaje de no violencia, a través de la acción de La Comunidad para el Desarrollo Humano, también a nivel mundial; en diciembre de 1983, con una importante campaña de firmas por el servicio militar optativo, sostuvo con decisión que se debía cancelar en nuestro país el servicio militar obligatorio. Durante tres meses invadió todas las calles del país y logró juntar un millón doscientas mil firmas para respaldar el proyecto de ley.
Ese proyecto cayó en manos de diputados de distintas agrupaciones, y a pesar del peso de su respaldo, cajoneado por los legisladores, nunca salió a la luz, para ser tratado. Recordemos que fue el asesinato del soldado Carrasco, el que tuvo que acontecer para que la Política decidiera dejarlo sin efecto.
Aquella irrupción fue en el día Internacional de la Mujer, no por casualidad. Comenzaba allí un significativo aporte con hechos, no con declamaciones, del lugar que la mujer debía ocupar en los espacios políticos dentro de los partidos y en los lugares de decisión.
Por supuesto que estaba fundamentado en la igualdad de oportunidades, en la participación política, y proponía ya en aquellos tiempos, la creación del Ministerio de la Mujer; tiempos en los que la denodada lucha del feminismo iba por un cupo, que terminó siendo del 30%, no sin generar una feroz resistencia machista, al punto de haberse recurrido a la vía legal para impedir su aplicación (legisladores varoncitos, claro, lo judicializaron).
Mientras tanto el partido integraba sus listas encabezadas por mujeres, en todas las provincias y municipios. En alguna provincia, hasta la Junta Promotora del partido estaba integrada solo por mujeres, lo que dio lugar al rechazo del juzgado electoral, ya que la justicia consideró “poco serio” esa integración.
Desde su primera participación en elecciones, el Partido Humanista impulso la participación de la mujer en los cargos partidarios y electivos de mayor responsabilidad
Un aporte silencioso o silenciado, ya que todo siempre se mide en cantidad de votos, y se pierden de vista aquellas acciones que van marcando huella, abriendo camino, hasta que queda instalado, sin que muchas veces se conozcan bien, las distintas vertientes humanizadoras que han aportado a la concreción de derechos.
Un saludo especial a las compañeras y compañeros humanistas que siendo coherentes con la doctrina que ha inspirado nuestra acción, han apoyado y lo siguen haciendo, la lucha de las mujeres por más y mejores derechos, llevando a la práctica política y social los valores humanistas de no discriminación y de no violencia.